Aguas cristalina y timos!!

El fin de semana ha sido algo ajetreado, de aquí para allí, pero muy muy bien. (Mañana igual cuento la semana)
El sábado, a eso de las 5,30 de la mañana nos fuimos a agarrar un bus para irnos a la Laguna de Lachua, una reserva natural cercana a Cobán, el bus fue lento, lleno de gente, como siempre y por una carretera larga y pesada. A las 3 horas de viaje nos encontramos ante la puerta de la reserva, junto a Wiso, Javier, Tino y un servidor.
Al entrar nos cobran la entrada y los dos españoles intentamos que nos rebajen el precio como a los guatemaltecos, que pagamos Q 40 más pero no hay manera, no sirve que digamos que estamos de voluntarios, hay que demostrarlo...
Finalmente pagamos como buena gente y nos vamos para adentro, el sendero que nos lleva por el medio de la selva, en la cual hay una humedad muy elevada y un calor tremendo, nos dirige hasta la laguna, el señor de la entrada nos advirtió que no nos saliésemos del camino, pues hay muchas serpientes, y el viernes, Kata, la alemana, también nos contó que a un amigo suyo le mordió una allí, y casi palma, así que nosotros vamos con atención.

 

Tras una hora de camino, llegamos a un pequeño muelle desde donde se ve toda la laguna con su aguas cristalinas... impresionante.

 

Continuamos media hora más, para llegar a la zona de acampada y zona de baño, para darnos un buen baño, mientras pensamos si nos quedamos a dormir o no!!
Después del baño, no hemos visto ni un solo cocodrilo, (el señor de la puerta dijo que los había), pensamos que es mejor volver, puesto que el ambiente solo es de varías familias guatemaltecas pasando allí el día, así que comemos rápido y nos volvemos para agarrar el último bus que sale a las 3.

Los cocodrilos es cierto que están en la laguna, pero solo en la noche, durante el día están en los ríos que desembocan en Lachua, también nos dijo el señor que donde había nutrias era seguro bañarse, porque allí no había cocodrilos.

De regreso nos encontramos con un grupo de españoles, que si van preparados para acampar, nosotros no llevábamos ni  una linterna  para pasar la noche... pensamos en volver, pero al final no lo hacemos.

El bus que nos recoge va totalmente lleno, así que nos toca ir de pie, el ayudante se encarga de subirnos las mochilas al techo de la furgoneta... de camino, pensamos que llevamos en la mochila, pues el ayudante se ha quedado allí, no nos vaya a robar algo.

Cuando llevamos una hora de camino, nos toca sentarnos, al fin, se estaba empezando a hacer insoportable....

Cuando llegamos a Cobán, lo primero miro la mochila, pues me he dejado el móvil guatemalteco, y evidentemente, no está... no aparece por ningún sitio, el chófer dice que registre yo al ayudante, pero el dice que no lo ha tocado, finalmente, me quedo sin móvil...


Durante la cena me decido a irme al día siguiente a Samuc Chempey, todo el mundo dice que es precioso, así que como nadie quiere acompañarme, me voy yo solito.

Salgo de casa temprano para agarrar el bus, y allí me planto, llego a las 7, pero no sale hasta las 8. A las 10,15 estoy en Lanquín, donde hay que agarrar un carro para llegar a Samuc.

 

Tras varios intentos de timo, me subo en el carro que me parece más barato y allá que me voy... Tras 10 km, en los que no se ni donde estoy, más que voy con tres señores en el coche, que en cualquier momento me podrían robar, llegamos a la entrada del parque. De camino me encuentro con los malagueños, que vuelven a Lanquín a pie,(10km de subida exagerada), ellos también me aseguran que me va a encantar.

 

Comienzo a andar hacia el mirado de Samuc, y veo un cartelito, que anuncia 1,15horas de subida, cuando llevo 10min, pienso que voy a morir, es demasiada pendiente... menos mal, que a la 35 minutos llego al mirador. Las vistas de las pozas, ni que decir tienen...

Desciendo hacia las pozas, y sigue la misma pendiente, pero al contrario.
Al llegar a las pozas, me encuentro ante un paisaje acogedor e impresionante, la verdad es que a merecido mucho la pena llegar hasta aquí, aunque sea solo, no me arrepiento.Aguas cristalinas en las que bañarse tranquilamente, con un río pasando bajo la piedra donde se encuentran las pozas, el lugar más bonito que he visto...

A la vuelta si comienzo a arrepentirme, pues mi chófer me asegura que no hay buses de vuelta a Cobán, que han cortado la carretera a los buses, pero que si quiero me lleva el por Q 300, es el momento en que pienso que me quiere timar... El me insiste y yo insisto en el no, que antes me quedo a dormir en el pueblo, pero me busco yo el hotel, porque el ya me dice que su hermano tiene un hotel, la gente aquí es así de apañada...

Finalmente llegamos a Lanquín y aparece un bus de la nada, lleno de gente y en el cual, se subo muchísima más gente, yo ya no quepo, pero el chófer me insiste en que suba, que con mi cambio el para al chófer y aún me sobra, así que como es el último del día, tonto de mí así lo hago.

El señor, me devuelve mi cambio y nos despedimos, a sido imposible entrar en el bus, así que me toca subirme al techo del bus, junto a un americano que no habla y varios guatemaltecos. Me aseguran que en el primer pueblo, habrá sitio abajo, que la mayoría de gente se quedan allí, pero no es así, hasta el pueblo antes de llegar a Cobán, Carcha, no me puedo bajar, y allí porque la policía no lo permite.

Es cierto que ha sido mejor viajar allí, pues las vistas eran impresionantes, aunque mi cámara se ha quedado sin batería... eso si, ha habido un rato de tensión, pues una rueda si ha rajado y le colgaba un trozo, pero no le han dado mayor importancia que cortar el trozo con un machete y continuar, en Guatemala no hay problemas de ese tipo. 



Cuando llegamos a Cobán, a los 5 minutos de tener asiento, me dicen que no he pagado, que vuelva a pagar que el otro señor no les ha dado nada, así que sí, me ha timado... me siento decepcionado por fiarme de la gente.